Salamanca CF UDS

El Helmántico vive el ‘Día internacional de la felicidad’ en torno al Salamanca UDS (Contracrónica y fotos de Álex López)

Sólo quien ha conocido el Helmántico en sus grandes momentos es conocedor de su magia. Es un estadio querido en toda España, y en especial por todos los salmantinos y, por supuesto, los unionistas han vivido allí tardes gloriosas. Pero esa magia lo es para lo bueno y para lo malo. También es un estadio duro, exigente, que si no estás capacitado para jugar en él se te cae encima, hace que te tiemblen las piernas y que remates p’atrás.

Estamos cerrando mayo, mes de Comuniones y el vetusto estadio no quiso ser menos y esta mañana asistía a la más feliz de todas ellas, la que unía a afición y equipo, con los seguidores agradeciendo el esfuerzo realizado en los últimos meses, pidiendo la continuidad de muchos jugadores y, en especial del técnico, Lolo Escobar.

Cada lágrima del míster, de Molina, cada abrazo entre los jugadores, cada plegaria de Kristian, cada gol, cada remate, cada parada de ‘Javichu’… fueron las lágrimas, los abrazos, las plegarias, los goles, los remates y las paradas de todos. De los que están dentro del club y de los miles de aficionados que arrastra, muchos de los cuales quisieron conferir al recinto esa magia de las grandes ocasiones. Demostraron cuál es el camino, en el que la UNIÓN es parte fundamental. Es fácil remar a favor de viento, pero el Helmántico demostraba que cuando hay que remar con el viento en contra, también sabrá llegar a puerto.

Mañana de despedidas, seguro. Es un final de temporada, pero hay gestos, hay personas, que quedarán para siempre en la memoria de los aficionados, en el recuerdo imborrable, en la historia blanquinegra.

El triunfo de hoy puede que sea modesto, pero es el triunfo de todos… De Dani, de David, de Óscar, de Lolo, del cuerpo técnico, de jugadores, de Alba, de Grana, de Maribel,de Jesús, de Sofía, de los directivos, de Loli, de los ‘Viajeros’, de los ‘chalecos amarillos’, de Protección Civil, de la Guardia Civil, de los Bracamonte, de la mí ‘Su’, de utilleros y perdón porque es imposible mencionar a todos (hoy las lágrimas de Fornieles eran las de todos). Pero también, y por la parte que nos toca, es el triunfo de las Lydias, de las Marías, de Morgan, de nuestro Álex López/Lorrys, de José Ángel, de Pablo, de Ricardito, etecé, etecé, etecé. Es incluso el triunfo de gente que no sólo no se alegra de los éxitos del club, sino que, incluso, lo es de los que no hacen. Pero si hay algo indiscutible es la magia del Helmántico. Una locomotora capaz de recorrer el mundo entero si coge la hoja de ruta adecuada.

El Helmántico es Salamanca y Salamanca es el Helmántico. El Helmántico simboliza la UNIÓN, la de todos los salmantinos. Así ha sido durante más de cincuenta años y así deberá seguir siendo. Una ‘Tercera Catedral’ como la bautizó el maestro Carlos Gil, que forma parte del patrimonio sentimental de Salamanca, ese que se transmite de generación en generación, ese que es ya leyenda. Hoy lo volvió a demostrar y hoy escribió una página de ese libro. ¡Gracias a los que lo han hecho posible!


Fotos: Álex López